lunes, 2 de junio de 2014

¿Discriminación en Sur Corea?

noex
Deambulando por la red me encontré con un artículo que hace referencia a la discriminación, específicamente a extranjeros y si bien, se sabe que esto pasa en todos los rincones del mundo, Sur Corea no es la excepción.
Así que utilizaré está frase que le va muy bien a esté tema: “Cada quien habla, dependiendo como le fue en la feria” si has tenido una mala experiencia es muy obvia la reacción.
Y aunque ocurran este tipo de acciones discriminatorias tan sólo se tiene documentada una denuncia, está fue echa a los encargados de los derechos humanos en Corea del Sur,  y si se están preguntando si hubo alguna represaría la verdad es que no porque es bien sabido que es dicho país no hay ninguna ley que sancione la discriminación, sin embargo a las personas involucradas solo se les dio una notificación y solo se tubo la esperanza de no volverse a repetir.
Bien,  demos un vistazo rápido a uno que otro caso:

Caso 1: “No se permite la entrada a extranjeros a esté bar/discoteca”

El estadounidense de origen indio, Chetan Narain, de 25 años de edad, la noche de un jueves en el barrio de Itaewon, terminó de tomar en un bar del barrio y le preguntó al mesero si había alguna buena discoteca cerca del barrio.
El mesero le sugirió una ubicada a unos cuantos minutos de distancia, y Narain partió hacia ese lugar. Pero cuando llegó, se acabó su diversión nocturna.
“El portero de la discoteca me dijo:  Lo siento, pero creo que usted no cumple con nuestro código de vestimenta contó Narain.
Narain estaba confundido. Llevaba puestas una sudadera gris y pantalones, nada inusual. De hecho, mientras Narain preguntaba cuál era el problema con su atuendo, un coreano que llevaba puesto lo mismo venía de salida del bar. Se volvió evidente que el problema no era la ropa, dijo Narain, quien pasó algún tiempo con el portero interrogándole para “entender cuál era el problema”.
Por último, el portero dijo “Mírese a usted y mire al otro tipo, ¿qué le parece? Sólo piense. Mírese a usted mismo y piense”.
Finalmente Narain se fue del lugar, pero unos días después, en el barrio de la Universidad Hongik (Hongdae), se encontró con otra hostilidad similar, una pizarra frente a un bar en la que se leía en inglés“No extranjeros, lo sentimos. Este sitio es sólo para coreanos”.
Artículo completo aquí.

Caso 2: “No puede entrar al Sauna”

La afectada una mujer originaria de Uzbekistán, pero nacionalizada coreana, el incidente tuvo lugar el pasado Septiembre, cuando a Gu Su-jin de 31 años de edad y a su hijo se les dijo que no podían dejarlos entrar por ser extranjeros.
“Los extranjeros no pueden venir aquí. Los extranjeros ensucian el sauna y también está el problema del SIDA” fue lo que supuestamente le dijo un empleado a Gu.
“Los clientes coreanos se sentirán incómodos y por eso no permitimos del todo a los extranjeros”.
La paranoia ha llegado hasta tal nivel que los profesores de inglés (Todos los extranjeros) tienen que hacerse, desde hace tiempo, las pruebas del SIDA y de sustancias ilegales (drogas). Algo que, por cierto, también atenta contra los Derechos Humanos porque hasta donde yo sé, una persona que sea portadora de anticuerpos, aunque no haya desarrollado la enfermedad (como el mundialmente famoso baloncestista Magic Johnson) no sé qué problema puede tener a la hora de impartir clases de inglés. Me queda claro que Magic Johnson que es negro y “sidoso”, en Corea no debe de ser muy bienvenido. 
kisujinsauna
Dicho caso es el que mencione anteriormente de ser el único documentado y también puede ser leído en el link debajo del caso 1.

Caso 3: “Que No puede entrar al Sauna, entienda por favor”

Mi amiga y yo llegamos a la sauna, con la intención de pasar un tiempo y cuál fue nuestra sorpresa que no más entrar en el área del recibidor nos dijeron (en coreano): “No se admiten extranjeros”. Como yo hablo bien coreano, le respondí a la muchacha que por qué. Primero se sorprendió porque yo hubiera entendido lo que ella había dicho, y segundo ignoró totalmente mi pregunta. Le pregunté entonces a otro muchacho que también estaba en el mostrador y éste dijo: no es cuestión de nosotros, sino del jefe. No se aceptan extranjeros. De nada valió que le explicara que yo soy residente en Corea.
Mi amiga y yo nos quedamos atónitos ante tan brutal acto de discriminación racial en pleno siglo XXI, en un país supuestamente desarrollado, y una de las principales economías del planeta. Inmediatamente se me vino a la idea lo escandaloso que podría ser que algún lugar público, como un spa o un restaurante en Estados Unidos dijera “no se aceptan coreanos”.
Leer artículo completo aquí.

En Conclusión:

Después de leer estos casos es importante decir que son una minoría que es lo bueno o al menos sólo estos han sido expuestos y es que si bien las personas siempre vemos lo malo de lo que nos rodea lo cierto es que debemos comprender todo desde su cultura, costumbres y tradiciones antes de sacar conclusiones y decir que todos los coreanos son racistas o xenofobia  cuando realmente no lo son todos.
Y como lo mencionaba al principio esté es un tema que pasa en todo el mundo y tal vez en algunos lados es mucho más notorio que en otros, pero les digo que haciendo conciencia también depende mucha de la cultura, pues lo que está bien para algunos, para otros no lo está y sobre todo en Corea ya que pareciera es similar a nuestra cultura en occidente no lo es y hay muchas cosas en las cuales no se coincide y son propias de ellos y es por eso de su forma de ser, aparte en un foro de coreanos hispanohablantes se decía que los más nacionalistas son los que viven fuera de Corea así que es muy poco ético catalogar a todos siendo discriminadores.
Finalmente hay que seguir valorando a la gente por lo que es sin importar de donde venga, el color de su piel, la forma de sus ojos, sus gustos sexuales, su cultura o su religión. Porque personas buenas, honestas, sinceras, agradables, simpáticas, etc. así como malas personas, desagradecidos, violentos, maleducados, etc. Los hay en todas partes y lugares. No importa como seas por fuera, sino cómo funciona tu cabeza y corazón.

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